Noorulhaq es el administrador de la casa de huéspedes situada justo enfrente de la Embajada de España en Kabul. Contempló desde ahí el ataque y ha continuado observando lo ocurrido desde entonces en la legación, como las inspecciones para comprobar que los terroristas no habían dejado ningún explosivo en el edificio. Asegura que los miembros del comando no entraron aquí, sino que se dirigieron directamente a la sede diplomática de nuestro país.