Dos días después del desalojo del centro social Patio Maravillas, el Ayuntamiento de Madrid abre el debate con un proyecto piloto: ceder espacios públicos para fines sociales, algo parecido a lo que se hace en la Tabacalera, antiguo edificio okupa rehabilitado. En definitiva se trataría de legitimar su actividad, pero no se concreta si es solo como centro o también como vivienda. El PP se ha apresurado a criticar el proyecto.