Citado para declarar mañana como imputado, Rodrigo Rato se siente víctima de una cacería política. Así se lo ha contado en exclusiva a las mañanas de cuatro. "Se me ha sometido a una cacería política nunca vista" "Es una decisión política nunca vista desde 1977. Es el uso del Estado para sus vendettas políticas". Declaraciones que realiza el día después de que la directora de la oficina antifraude no asumiera ante el juez el informe por el que se detuvo durante horas a Rato. Es más, en esta carta al juez señala como responsables a dos funacionarios. Un Informe en el que se habla de indicios de blanqueo y alzamiento de bienes que el juez,de momento, no comparte. "La ONIF no ratifica el informe pero se han tomado las medidas cautelares más extremas". Desdibujados los delitos más graves, lo que sí parece claro es que se enfrenta a un delito contra la Hacienda Pública por haber defraudado un millón de euros.