Unas 50 mil personas y ex mandatarios mundiales como el ex presidente estadounidense Bill Clinton, han rendido hoy homenaje a las víctimas de la peor matanza ocurrida en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Un genocidio no reconocido por Serbia como tal, pero en el que murieron más de ocho mil musulmanes, asesinados en Srebrenica por las fuerzas serbobosnias en plena guerra de los Balcanes. Aún quedan unas mil víctimas, entre ellas niños, por identificar.