El acuerdo entre los dos grandes partidos sobre corrupción parece que no va a llegar. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha acusado al secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez de no querer acabar con la corrupción en toda España. "Su voluntad de acabar con este problema tiene un límite: Despeñaperros", ha dicho. Además, le ha preguntado sobre quién tiene la responsabilidad política dentro del PSOE por estos hechos, y le ha dicho que si él sólo dirige el PSOE en una parte de España y en otra Susana Díaz.