El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha vendido hoy la mejor cara de España y su recuperación ante los empresarios reunidos en Alicante. No ha habido ni corrupción ni recados a Cataluña, hoy ante los empresarios lo que tocaba era vender España. "De vez en cuando deberíamos recuperar una costumbre que es hablar bien de nuestro país", decía. Y a eso se ha puesto el presidente del Gobierno.