La comparecencia del expresidente de la Generalitat de Cataluña Jordi Pujol ante el Parlament para explicar su dinero oculto en Andorra ha terminado al filo de las 18.30 horas. Han sido dos horas y media en las que Pujol se ha defendido argumentando que no es un "corrupto". Los grupos de la oposición, especialmente PP y Ciutadans, han tratado de arrancarle alguna respuesta, infructuosamente, sobre su fortuna oculta. La comparecencia ha sido de guante blanco. Al término de la misma y a micrófono cerrado, Pujol ha compartido confidencias y saludos con diputados convergentes, como su portavoz Jordi Turull, e incluso con Gemma Calvet, la parlamentaria de ERC que ha intervenido en vez de Oriol Junqueras. Ha sido el modo de agradecer su presencia ante el Parlament.