El ministro de Educación ha cedido a la presión autonómica. Tras las protestas de las cinco comunidades no gobernadas por el PP, José Ignacio Wert aceptó anoche dos cambios: dará más tiempo y más fondos para que su polémica reforma educativa entre en vigor en septiembre. José Ignacio Wert entró repartiendo saludos y besos a los consejeros autonómicos y ya sentado a la mesa de negociación, se encontró de frente con los de las cinco comunidades más combativas contra la LOMCE.