El número de desahucios se aceleró en los seis primeros meses de 2013. Lo certifica un estudio del Banco de España, que cambia la metodología respecto a otras muestras, lo que dificulta las comparaciones. Solo hasta junio del año pasado, el número de desalojos llegaba ya hasta los 15.500. Algunos creen que el código de buenas prácticas no ha sido suficiente. Sí se ha notado ese código de buenas prácticas en que ha habido más entregas voluntarias que las ordenadas por el juez. De los 15.000 desahucios apenas 1.000 eran viviendas ocupadas, el resto estaban vacías.