Miles de personas se han manifestado en la tarde de este sábado en Valencia contra el cierre de Canal 9, decidido por el presidente Alberto Fabra. A pesar del cisma de los últimos años entre la ciudadanía y la cadena de televisión, el apagón ha provocado una oleada de solidaridad con los más de mil trabajadores que serán enviados al paro. Otra concentración similar ha tenido lugar en Alicante. En la capital valenciana, se han hecho hasta castellets, pero esta vez no eran festivos. Parecían una alegoría de lo que ha ocurrido: la crucifixión de toda la plantilla del canal.