Los habitantes de Benidorm y entre ellos, muchos turistas, han hecho cola durante toda la tarde frente al Ayuntamiento donde ha sido instalada la capilla ardiente con los restos de Manolo Escobar. Una inmensa cola para despedir a la voz más masculina de la copla. Hoy ha muerto a los ochenta y dos años en su casa de esa población alicantina. Había nacido en Almería y se hizo artista en Barcelona.