Día decisivo para el sector naval español. Hoy el Colegio de Comisarios de Bruselas debe decidir si España debe reembolsar las ayudas recibidas entre 2005 y 2011 y en qué cuantía. Ayer, aquí, el Pleno del Congreso votó por unanimidad una proposición no de ley a favor de que no haya que devolverlas. Hablamos de 2.800 millones de euros que, de tener que ser devueltos, supondrían una sentencia de muerte para el sector. Se podrían perder hasta 87.000 empleos. La pasada semana, el ministro de Industria, los sindicatos y los presidentes autonómicos con intereses en el sector, se reunieron con el comisario Almunia para pedirle que no haya devolución. El sector sigue en pie por su supervivencia.