Eliana Guerrero hizo sonar su silbato cuando vio a unos carteristas robando a una pareja de turistas. Ellos intentaron huir pero, entre la llamada “cazacarteristas” y una veintena de pasajeros, lograron impedírselo. Los agentes de policía llegaron más tarde y pudieron detener a los cuatro sospechosos. Tenían antecedentes y acumulaban más de quinientas identificaciones. Eliana lleva varios años persiguiendo a los ladrones en el metro y alertando a los pasajeros de su presencia. Gracias a que ya es capaz de reconocerlos, puede evitar robos como el del pasado martes.