Hace tan solo cuatro días, Alfredo Sáenz respondía así sobre su posible marcha de la entidad: "No hay comentarios". Su continuidad dependía de lo que decidiera estos días el Banco de España sobre su "honorabilidad", ya que tenía antecedentes penales. El caso se remonta a los años noventa, cuando Sáenz era presidente de Banesto. El banquero fue denunciado por acusación falsa contra unos deudores y en 2011 fue condenado.