El juez José Castro impondrá en las próximas semanas a Iñaki Urdangarín y su exsocio Diego Torres entre seis y ocho millones de euros de fianza. Con esta cantidad afrontarán el supuesto daño causado a la administración con sus negocios. A las tres de la tarde de mañana termina el plazo para que ambos presenten sus alegaciones, pero juez y fiscal tienen claro que las facturas presentadas por Urdangarín están muy lejos de justificar los casi seis millones de euros que recibieron de los Gobiernos valenciano y balear entre 2004 y 2006.