Era el 20 de agosto de 2008. 154 personas fallecieron y 18 resultaron heridas en este accidente en el aeropuerto de Madrid Barajas. Han pasado más de cuatro años y las familias de las víctimas continúan sin haber recibido ninguna indemnización. La Audiencia Provincial de Madrid archivó la vía penal al considerar que no se habían podido determinar las causas del accidente. Ahora la aseguradora de Spanair, la compañia MAPFRE, ofrece 18,7 millones de euros a los perjudicados para dar por zanjado el caso. Su intención es indemnizarles según el baremo que se aplica en el caso de los accidentes de tráfico.