Felip Puig, forzado a dar explicaciones por segunda vez, mantiene la versión original de la Generalitat y niega que se dispararan pelotas de goma. Sin embargo, admite fallos en la cadena de mando, que le ocultó el informe completo. Por ese motivo el comisario Sergi Pla ha sido destituido. Puig dice que él mismo también puso su cargo a disposición de Artur Mas, pero que éste rechazó su dimisión.