La auditoría realizada por Oliver Wyman, Deloitte, PwC, Ernst & Young y KPMG sobre las cuentas de cada uno de los grupos bancarios españoles ha determinado que el sistema financiero español necesita 59.300 millones de recapitalización para afrontar la peor e hipotética crisis posible, aunque esta cifra se reduce a 53.745 millones "si se consideran los procesos de fusión en marcha y los efectos fiscales". Entre los bancos peor parados están los ya rescatados por el Estado, especialmente Bankia-Banco Financiero de Ahorros, que en el peor escenario necesitará 24.743 millones de euros. Este test ha sido una de las condiciones exigidas por la Eurozona a cambio de la línea de crédito de 100.000 millones para sanear la banca.