Hoy toca llenar el carro de lo que sea: alimentos, productos de limpieza, libros de texto, etc. Todo el mundo sabe que mañana sube el IVA, así que hay que hay que comprar de más para ahorrar. La medida no convence a casi nadie. Los hay que se quejan, aunque la mayoría se resignan. Unos llenan el carro de la compra y otros el depósito del coche. En las gasolineras se acumulan clientes, la mayoría enfadados. Quedan unas horas de tiendas abiertas y, aunque muchos no saben exactamente cuánto tocará pagar de más, tienen claro que apurarán las compras hasta la hora del cierre.