El bazar 'Té con limón' de Madrid no cierra por jubilación, ni por cambio de actividad sino "por desesperación". En la fachada, el propietario César Calle, de 52 años, da las gracias a todos los que han contribuido a echar el cierre a su negocio. Agradecimiento a la inyección de dinero público a los bancos, a la patronal, a los sindicatos, a la corrupción, y a los privilegios de los políticos. Esta forma de hacer público el cierre, ha sorprendido a los vecinos.