Tras diez años de lucha en los tribunales entre el ayuntamiento de la localidad, la Junta de Andalucía y organizaciones ecologistas, el Tribunal Supremo ha decretado que el hotel del Algarrobico debe ser derribado. La noticia ha provocado la indignación de los vecinos, en su mayoría defensores del complejo hotelero. Defienden que cuando se comenzó a construir era totalmente legal y que una vez terminado, este complejo de 411 habitaciones y una veintena de plantas se iba a convertir en un importante foco de puestos de trabajo.