El ministro de Economía, Luis de Guindos, preocupado por la desviación del déficit público, que en 2011 se desbordó hasta el 8,51 por ciento, cuando la exigencia de Bruselas era del 6 por ciento, dice ahora que mañana jueves dará en Europa una explicación exacta, con la que tratar de convencerles para que baje el objetivo de este año, fijado inicialmente en el 4,4 por ciento.