En un congreso tan igualado los discursos son, más que nunca, decisivos. Rubalcaba ha sido por sorteo el primero en hablar. Ha empezado prometiendo un liderazgo fuerte: "A mí no me van a quebrar, seré un líder fuerte, a mí no me van a hacer dar un paso atrás", ha dicho. También ha asegurado que el partido no necesita "salvadores":"No creo que sea el momento de liderazgos personalistas", ha asegurado. Después ha llegado Carme Chacón, prometiendo futuro. "Yo no me presento para gestionar una travesía del desierto, sino para gestionar cuanto antes una mayoría social", ha dicho la aspirante. Chacón ha asegurado que lo que eligen este sábado los delegados es si "hacen historia" o si permiten que "la historia pase de largo".