La Dirección General de Salud Pública y Consumo del gobierno balear ha inmovilizado los dispensadores de chupitos de alcohol inhalados que se sirven en bares de la zona de Magaluf, en Mallorca, por el posible riesgo que acarrean para la salud. Las autoridades regionales investigan esta moda conocida como ¿osxyshot¿ y que causa una embriaguez rápida a sus consumidores, sin provocar efectos de resaca. La consejería ha inmovilizado al menos seis aparatos que suministran este tipo de chupitos cuyo precio no supera los cuatro euros. En los que han incautado, las autoridades no han podido determinar qué tipo de alcohol se suministra en ellos. Los dispensadores de alcohol han adulterado aparatos que sirven para uso sanitario, y que se suelen usar bajo prescripción médica.