El salario mínimo subirá entre un 1,5 y un 2,5 por ciento en 2012. Se trata de una subida que estaría por debajo del IPC, ahora mismo en el 3,5 por ciento. Por eso los sindicatos no están conformes y recuerdan al Gobierno que había prometido que el salario mínimo se elevaría hasta los 800 euros. Ahora mismo es de 641 euros al mes.