Ha sido una noche de miedo pero también de frío porque muchos vecinos de Lorca (Murcia) la han pasado a la intemperie. Miles de personas se congregan en el Huerto de la Rueda, o en los parques. Aunque hay quien prefiere más intimidad y por eso, el cobijo de los coches se convierte en otra opción. Además de las mantas, también han escaseado el agua y los alimentos para quienes se encontraban fuera de sus hogares.