Una noche más el sonido de las bombas retumba en Gaza. A los ataques aéreos se suma ahora la artillería terrestre. Hasta el momento 103 palestinos han muerto, entre ellos 27 niños y hay más de 500 heridos. Algunos medios apuntan a que Hamás habría ofrecido un alto al fuego, que Netanyahu no está dispuesto a aceptar al menos hasta llevar a cabo su estrategia, acabar con objetivos localizados de las milicias islámicas. Nueve mil reservistas israelíes se preparan en la frontera para iniciar en cualquier momento la ofensiva dentro de Gaza. Del otro lado los cohetes sobrevuelan el cielo de Tel Aviv. Más de 1.700 se han lanzado desde el lunes y en las últimas horas tres proyectiles se habrían enviado desde el sur del Líbano. Mientras los enfrentamientos entre judíos israelíes y árabes en el país son cada vez más violentos. La situación está descontrolada, el presidente de Israel habla ya de una posible guerra civil.