Con una recepción en el palacio de Buckingham, la reina Isabel II, ha intentado rebajar la tensión de la cumbre de la OTAN en Londres, por el 70 aniversario de la Alianza Atlántica. Una velada con un ambiente más distendido, con apretones de mano y buenas caras, donde Pedro Sánchez ha estado charlando con Trump y Macron. Los dos protagonistas de la cumbre, tras el duelo de reproches que se han lanzado durante el día. Había más que tensión en el ambiente durante el incómodo cara a cara que ambos han mantenido. Además de las amenazas de Trump de imponer aranceles a los productos franceses por la tasa a las tecnológicas estadounidenses. El presidente de Estados Unidos ha criticado al francés por decir que la OTAN estaba en 'muerte cerebral'. En medio de todo, está el órdago del presidente turco Erdogan de bloquear el consenso sobre Rusia si no se declaran terroristas a las milicias kurdas de Siria. Hoy todos los líderes tienen una reunión conjunta, antes de dar por concluida la cumbre.