Al grito de 'Tijuana unida jamás será vencida', cientos de vecinos de la ciudad fronteriza protestan por la llegada masiva de migrantes. Con banderas y pancartas exigen la salida inmediata del país de los integrantes de la caravana. Les acusan de generar inseguridad y quebrantar las leyes mexicanas. Casi 3.000 centroamericanos han llegado a la ciudad es una semana, los albergues están saturados y muchos están durmiendo en la calle. Las autoridades han pedido apoyo federal para brindarles ayuda humanitaria porque el proceso de asilo en estados unidos llevará meses.