A tres días de la segunda vuelta de las elecciones francesas, el actual presidente Francois Hollande ha visitado por primera vez la sala Bataclan, donde hace un año y medio los yihadistas sembraron allí el terror. Rodeado de un fuerte dispositivo de seguridad, Hollande ha aprovechado la actuación de un humorista conocido por sus posiciones en contra del Frente Nacional, para asegurar que el humor es una de las armas más poderosas contra el terrorismo.