Lo buscan los miembros de las unidades de élite de Alemania. Su objetivo, Anis Amri, tunecino, 23 años y cuyo carné de identidad estaba tirado dentro de la cabina del camión que causó la masacre en el mercadillo. El gobierno alemán habla de un nuevo sospechoso pero, añade, que sigue sin saber si fue el autor del ataque. Eso sí, se ha emitido una orden de búsqueda y captura europea con todos sus alias y se ofrecen 100.000 euros por cualquier pista.