Decenas de manifestantes se concentraron en el centro de Chisinau para protestar por el desfile militar con motivo del 25 aniversario de la independencia de Moldavia. Más de 2.000 militares y unos 80 vehículos han recorrido las calles de la capital. Un acto que en opinión de los protestantes supone un gasto excesivo. La Policía recurrió a gas lacrimógeno para frenar las protestas cuando los opositores intentaron acceder a la plaza central con el objetivo de impedir el paso de los militares. El país vive un momento de convulsión política tras el escándalo de corrupción que salpicó al Gobierno el año pasado.