La primera huelga general en Grecia para protestar contra las medidas que ha tomado el Gobierno de Alexis Tsipras en el marco del tercer rescate ha afectado, sobre todo, a los medios de transporte, comercios y a los medios de comunicación, que han establecido servicios mínimos para abrir la huelga. Durante la manifestación que ha tenido lugar para protestar contra los recortes de Syriza se han vivido momentos de tensión, especialmente tras el lanzamiento de cócteles molotov por parte de los manifestantes y la respuesta con gases lacrimógenos de los antidisturbios.