Cansados, con la travesía más dura de su vida a cuestas, llegaban esta madrugada al puerto de Catania 27 de los 28 supervivientes del naufragio frente a las costas de Libia. Escasamente un 3% de todos los que se cree viajaban en esa embarcación. Según los últimos datos, algo más de 800 personas. Sirios, eritreos, somalíes, niños, mujeres, varones adultos, descienden por la pasarela con ayuda, despacio pero firmes. Todos menos dos detenidos, el capitán del navío y su primero de a bordo, un tunecino y un sirio, detenidos por trata de personas.