Ciudad de Debaltseve, al este de Ucrania. Un equipo de periodistas se encuentra grabando en las afueras. A pocos metros un mortero alcanza un gasoducto produciendo una enorme explosión. Las llamas se propagan rápidamente. Salen corriendo del lugar hasta alcanzar al otro equipo. Moviéndose a hurtadillas por miedo a otro posible ataque. Uno de ellos está gravemente herido. Le ayudan a subirse en la parte de atrás del otro coche y salen a toda velocidad hacia el hospital.