Tras los ataques del 11-S, Estados Unidos respondi ó con una guerra a miles de kil ómetros y la Ley Patriótica. Un texto elaborado, en apenas 15 d ías, que daba grandes poderes al Estado para espiar a sus ciudadanos. Más seguridad pero tambi én excesos como escuchas masivas o el espionaje incluso a mandatarios de países aliados.