Miles de casas sin electricidad, vuelos y transbordadores cancelados. Todo completamente inundado en California. Las intensas lluvias, el fuerte viento y el intenso oleaje en las zonas costeras han provocado multitud de daños. Calles y carreteras cortadas, árboles arrancados de raíz, escuelas y negocios cerrados. El servicio meteorológico habla ya de la tormenta más intensa en una década.