A las siete de la mañana ha expirado la tregua de 72 horas entre Hamas e Israel. Tres días en los que la Gaza ha podido respirar y comprobar las huellas de una guerra tras 28 duras jornadas. Un conflicto que parece que está lejos de terminar. Los dos bandos se encuentran preparados para el ataque. En El Cairo no se han consolidado las negociaciones y lejos parece un nuevo parón de otras 72 horas. Hamas insiste y no rebaja sus exigencias.