Noche de carreras en Gaza. Primero en coche y luego a pie, para intentar que los heridos lleguen con vida a los hospitales. Noche de dolor, tras saber que no se ha podido salvar al ser querido. Noche de despedidas antes del traslado al depósito de cadáveres. Ya de día, otro bombardeo ha destruído este edificio en Yan Younis, matando a 17 palestinos. Entre los heridos, hemos vuelto a ver a un buen número de niños y bebés. Un carro de combate israelí ha alcanzado los depósitos de combustible de la única central eléctrica de Gaza. Los bomberos se muestran impotentes ante el enorme incendio que amenaza con dejar sin luz a gran parte de la Franja.