Esta es una de las experiencias más especiales para los amantes del mundo marino. Nadar con ballenas es un espectáculo que puede vivirse pocas veces al año. Australia es el destino perfecto. En especial, durante Junio y Julio, cuando las ballenas emigran en busca de aguas más cálidas para dar a luz a las crías. Se puede nadar con ellas, jugar, incluso mantener contacto visual. Puede haber más de 50 ejemplares nadando junto a los turistas. Son ellas las que se acercan, porque son extremadamente curiosas.