Oculta tras la fachada de una fábrica de cemento, la lujosa casa del líder del cártel de los Caballeros Templarios. La policía mexicana lanzó una operación en Michoacán para capturarle, sin éxito. Pero los agentes si han comprobado el nivel de vida del que disfrutaba este narco: una casa de siete habitaciones al que no le falta detallecon la fortuna amasada con el tráfico de drogas: jacuzzi inteior y exterior, ropa de marca de lujo y botellas como esta, del mejor champagne francés.