Estas cámaras de seguridad de un estudio radiofónico captan el momento en el que un terremoto sacude el norte de la isla Sur de Nueva Zelanda. Tras el seísmo se registró una réplica de 5,7 grados de magnitud. Los bomberos acordonaron la zona de uno de los edificios afectados. Así se sintieron en el momento del temblor algunos testigos: "Al principio estaba tranquilo, pero cuando sentí el temblor sobre mis pies me entró el pánico. No quiero volver a estar en otro". "Los cables estaban temblando, parecía que todo se iba a caer. Era una locura". Pasado el susto, algunos recordaban lo vivido. Poco a poco todo volvía a la normalidad. Las autoridades de Nueva Zelanda han suspendido el transporte aéreo y ferroviario del país. No se han registrado heridos ni víctimas mortales.