Lo que comenzó con una protesta pacífica por la tarde en Sao paulo, terminó con varios disturbios frente al ayuntamiento. La guardia municipal se ha tenido que refugiar dentro del edificio, donde algunos manifestantes se han enfrentado a ellos. Han quemado banderas y hasta una unidad móvil de televisión. Las de esta noche han sido unas protestas menos multitudinarias en las que han participado unas 50.000 personas.