La Reina Isabel II llegó hora y media después de que comenzase un concierto de lujo con lo mejor de la música anglosajona. Además del ex-Beattle, Elton John, Kylie Minogue o Robbie Williams hicieron disfrutar a cerca de medio millón de fieles. El buen tiempo también acompañó, y el Príncipe Carlos dio gracias a Dios. Entre bromas, se acordó de su padre, hospitalizado por una infección de vejiga.