El detenido por la matanza en Noruega, Anders Behring Breivik, ha asegurado ante el juez Kim Heger que contó con la colaboración de "otras dos células" en el doble atentado que cometió el pasado viernes. La Policía, con ayuda de especialistas de Europol, continúa investigando esta hipótesis. El ultraderechista ya había levantado sospechas hace meses a raíz de la compra de productos químicos por Internet. El autor de la muerte de más de 70 personas ha declarado que no se siente culpable por los hechos. "Los crímenes fueron atroces pero necesarios", ha asegurado.