La Cumbre del G-8 que se celebra desde ayer en la ciudad francesa de Deauville finaliza este viernes. Durante dos días los líderes de los países que integran el grupo, Alemania, Francia, Reino Unido, Estados Unidos, Canadá, Japón, Italia y Rusia y Francia han debatido sobre seguridad, programas nucleares, economía global y sobre la ayuda financiera a aquellas naciones que han vivido la llamada primavera árabe, marcada por las revoluciones de Túnez y Egipto.