El lago Piru ha adquirido un enorme protagonismo en las últimas 48 horas después de que se conociera que Naya Rivera, actriz conocida por su papel de Santana en Glee, desapareciera en sus profundas aguas sin dejar ni rastro después de que saliera a nadar junto a su hijo, quien fue hallado con vida en el barco que ambos alquilaron horas antes. Tras saber que la policía daba por muerta ya a la joven, hoy salen a la luz nuevos y trágicos detalles de la búsqueda.

"La visibilidad no es muy buena; es más bien terrible. Hay muchos árboles y plantas y objetos bajo el agua que pueden causar enredos. Esto provoca que no sea una situación segura para los buceadores y que la búsqueda sea complicada", ha explicado el sargento Kevin Donoghue, del condado de Ventura. También ha aclarado que si bien "nadar está permitido en el lago", el agua, en ocasiones, "puede estar muy fría y tener condiciones que favorezcan la hipotermia".

Por este motivo, la búsqueda no intenta ya encontrar con vida a Naya Rivera, sino rescatar el cuerpo, algo que podría retrasarse durante semanas por las condiciones que el sargento ha mencionado durante su última comparecencia: "si el cuerpo se ha enredado en algo bajo el agua, puede que nunca aparezca", revelaron las autoridades, produciendo que se desvaneciera cualquier posibilidad de hallarla en buen estado de salud.