Su rostro se hizo famoso el año pasado por las redes sociales al solicitar vender 8.000 kilos de sandía que había recogido y no había podido vender. Ahora lanza una nueva iniciativa con un fin completamente distinto: pide que acudan a su tienda para vender 5.000 sandías y ayudar a las familias afectadas por la erupción volcánica de La Palma.
Sergio podría vender la fruta a un precio superior, ha decidido despachar cada kilo a 0,75 euros, 10 céntimos más caro que el año pasado. Esos 10 céntimos no se los quedará él, sino que irán destinados a aquellas familias que han sufrido desde el pasado mes de septiembre las consecuencias de la erupción del Tajogaite.
El año pasado Sergio pidió ayuda en una iniciativa a la que siguieron otros agricultores de otras islas, debido a la crisis que también está afectado al sector primario en Canarias.
