Alegando la disminución del número de parados, el secretario de Estado de Empleo, Juan Pablo Riesgo, anuncia una disminución del 23 por ciento respecto del año 2015 en las partidas para las prestaciones por desempleo. Para Rafael Simancas, del Grupo Parlamentario Socialista, se trata de una decisión “no solo criticable y censurable”, sino también de algo “vergonzoso”.