A partir de enero cobraremos más porque nos retendrán menos en el IRPF. Este impuesto bajará para todos. También subió para todos en 2011. Las rentas altas son las más beneficiadas, su retención baja del 52% al 45%. Para el tramo de renta más bajo se pasa del 24,75% al 19%. Éstas rebajas serán progresivas a lo largo de dos años, 2015 y 2016. Están exentos de retención los que ganen menos de 12.000 euros.